Existen muchas edificaciones cuyo sistema estructural consiste en pórticos espaciales en concreto en nuestro país. Sin embargo, ya sea por un evento sísmico que afecto a la estructura y causo una perdida de su capacidad, o por un cambio de uso que requiere un aumento de la misma, se hace necesario aplicar un reforzamiento a la estructura con el fin de garantizar que esta pueda cumplir con su ciclo de vida útil.
Por lo general, el reforzamiento de estas edificaciones suele realizarse con vigas diagonales metálicas, concéntricas o excéntricas.
El reforzamiento puede también darse con un encamisado o engrosamiento de los elementos en concreto. De esta manera evitamos la construcción de una nueva estructura sobre la existente, a cambio se aumentaran las dimensiones de los elementos intervenidos.
En el caso de las columnas, en ves de optar por un encamisado, se puede optar por la construcción de un muro adyacente para reforzar las columnas existentes.
Si bien se a hablado de el reforzamiento de la super estructura, es necesario hacer el mismo ejercicio para la cimentación. En muchas ocasiones se observan estructuras existentes a las cuales se les realizaran adecuaciones que implicaran un aumento de cargas en ciertos puntos o incluso un cambio de uso, por lo anterior, es necesario reforzar la cimentación existente.
Existen otros métodos de reforzamiento muy populares en la actualidad, como el uso de telas en fibra de carbono, grandes fabricantes como SIKA ofrecen estos productos, que garantizan que los elementos reforzados adquieran una mayor resistencia en el transcurso de la vida útil de la estructura.
Se debe mencionar que la decisión de aplicar o no reforzamiento a una estructura existente dependerá de los resultados obtenidos de un análisis de vulnerabilidad y un estudio de patología, que determinan las condiciones actuales de la estructura
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